martes, 8 de abril de 2014

2.3. Las mujeres en el maquis

Entrevista a Celia, una ex guerrillera antifranquista:

P. ¿Cómo era para una mujer la vida en guerrillas?
R. Cuando yo llegué a guerrillas eran casi todo hombres, solo éramos tres mujeres, y nosotras hicimos exactamente lo mismo que ellos, con nuestro macuto al hombro, las marchas por las noches a oscuras por aquellos montes. Nunca han tenido que ayudarnos para nada. La experiencia nos ha enseñado que efectivamente podemos ser igual que los hombres, lo mismo en el trabajo que en cuestiones de mando, en todo hemos hecho igual que ellos, en todo, y creo que no les queda duda, lo único que les queda es ese machismo de ver que antes dominaban ellos en todos los campos y ahora vamos adquiriendo más terreno nosotras. Hay que seguir luchando hasta llegar a lo que nos corresponde.
P. ¿Cómo llegó a las guerrillas?
R. Mi padre era guarda forestal y vivíamos en una casa de campo bastante aislada. Cuando acabó la guerra metieron a mi padre y a dos de mis hermanos en la cárcel, y mi madre, mis hermanos pequeños y yo, nos refugiamos en un pueblo cerca de Cuenca que se llama Morte, donde teníamos una hermana casada. Mi padre, que no había hecho nada más que ser un hombre republicano, un hombre de izquierdas, nada más, y había tenido dos o tres hijos voluntarios en el frente, estuvo cinco años en la cárcel. Cuando le detuvieron, le pegaron tanto que le rompieron un brazo y una pierna, y a mi madre, la pobre, la cogió la policía y la sostuvo delante de mi padre para que viera lo que le hacían. Mi madre llegó a casa deshecha y aquello le costó la vida, por eso yo siempre digo que a mi madre la han matado ellos, igual que han matado a mi padre, a dos de mis hermanos y para matarme a mí no les ha faltado casi nada.

http://www.levante-emv.com/valencia/2010/11/15/maquis-aprendi-mujeres-igual-hombres/756909.html

«El olvido es lo peor que nos puede pasar, aquí se pone nombre y rostro a los compañeros»

Quico’ pasó cuatro largos años en los montes de León; ‘Sole’, dos en la zona del Levante y Aragón. Ambos son ex guerrilleros que buscan recuperar la memoria histórica
«El olvido es lo peor que nos puede pasar, aquí se pone nombre y rostro a los compañeros»

En la plaza de Trascorrales ayer por la tarde no quedaba un hueco libre. Decenas de ciudadanos escuchaban los testimonios de dos miembros del movimiento guerrillero antifranquista; de Francisco Martínez y Esperanza Martínez, de ‘Quico’ y ‘Sole’, mientras quienes no pudieron contar su historia les miraban desde las paredes de la sala. «Aquí nos sentimos en lo nuestro. Conocimos a algunos de los compañeros asesinados que forman parte de esta exposición, que pone nombre y rostro a quienes el sistema democrático puso en el olvido», comentaban minutos antes de que diera comienzo la mesa redonda entorno a la muestra de Gerardo Iglesias.
Dicen que lo peor para ellos es ese olvido, esa «indiferencia ante las personas que lucharon contra la dictadura, solo para que el pueblo fuera libre». Ellos lo hicieron cada uno en su zona, cada uno con una historia que es la de muchos otros. Con permiso de ‘Quico’, las mujeres primero.
https://lamemoriaviva.wordpress.com/tag/guerrilleros-y-maquis/

No hay comentarios:

Publicar un comentario